Protegida por las montañas, Maramures, esta tierra que tan bien ha conservado su cultura y civilización, se ha transformado a lo largo del tiempo en un museo al aire libre, donde lo arcaico se entrelaza con lo moderno.La región es famosa por sus ocho iglesias de madera, Patrimonio Mundial UNESCO, por la arquitectura de las puertas también esculpidas en madera, la autenticidad de sus tradiciones, y también por sus maravillosos paisajes.
Maramures es famosa también por "El Cementerio Alegre", situado en Săpânța, y por el famoso tren a vapor de los leñadores – Mocanita – que atraviesa el Valle del Vaser (Valea Vaserului). La región cuenta con un paisaje único: montañas altas, colinas verdes, ríos grandes o pequeños, lagos, bosques, prados, todos forman una de las regiones más bellas de Rumanía. Casi el 50% de la región es montañosa, y aquí encontramos el pico más alto de los Cárpatos Occidentales: Pietrosu (2.303m). Estas montañas de Maramures son una unión natural y político con el país vecino Ucrania. Los Valles de Maramures están situadas en la parte noroeste del país y toman su nombre de los ríos que los atraviesan. Los más conocidos son: el Valle del Tisa, el Valle del Iza, el Valle del Mara y del Cosau, y el Valle del Vaser.
El Valle del Tisa
El río Tisa separa dos países con gente de la misma nación, es decir a los rumanos de Ucrania, en la frontera con el Maramures rumano, y a los rumanos del Maramures histórico. Estos rumanos, siempre olvidados en las descripciones de la región, consiguen conservar las tradiciones y costumbres rumanas y siguen esperando el día que pertenezcan, de nuevo, a la patria madre, Rumanía.
En el Valle del Tisa se encuentra el cementerio más bonito del mundo: el Cementerio Alegre de Săpânța, único por su manera alegre de presentar la unión del hombre con su destino final, la muerte.
El Valle del Iza
El Valle del Iza acompaña al río con el mismo nombre en su trayecto, y en él encontramos pueblos pintorescos, auténticos, con puertas esculpidas, iglesias de madera y unos impresionantes trajes regionales.
En este valle se encuentra el Monasterio de monjas de Bârsana, cuya iglesia está incluida en la lista de las iglesias de madera del Patrimonio Mundial UNESCO. Poienile Izei (los Claros del Iza) y la iglesia de Ieud Deal son otras dos iglesias antiguas construidas en madera e incluidas en el Patrimonio UNESCO.
El Valle del Mara y del Cosau
Afluente del Tisa, el Mara forma junto con el Cosau un paisaje alegre, atravesando pueblos que transmiten, por su autenticidad y belleza, la esencia de la región. Como objetivos turísticos puedes descubrir la Iglesia de Madera de Budești y la de Desești, ambas patrimonio UNESCO, y el balneario de Ocna Șugatag. Esta última, por su ubicación en una zona rica en aguas minerales, se recomienda en caso de afecciones reumáticas, del aparato locomotor, del sistema nervioso periférico, para tratar enfermedades respiratorias y ginecológicas. El lugar dispone de: aguas minerales cloradas, sódicas y calcinadas; dos piscinas grandes y una pequeña con agua mineral fría para baños; instalaciones para electroterapia y con aerosoles; dos piscinas grandes y tres bañeras con aguas minerales calientes; instalaciones para fisioterapia, envolturas en parafina, duchas subacuáticas y baños galvánicos.
El Valle del Vaser
El Valle del Vaser es uno de los valles más salvajes y bonitos de Rumanía. En esta zona descubrirás la Cascada de los Caballos (Cascada Cailor), que es la cascada más grande del país. Se puede acceder a ella andando o en telesilla. Otro punto de atracción de este valle es la ciudad balneario de Borsa. Su principal característica es la combinación de las terapias modernas con los factores naturales de cura, lo que crea una acción bioestimulativa benéfica sobre el organismo, con una eficiencia terapéutica en el tratamiento de las enfermedades: cardiovasculares, endocrinas, respiratorias, neuro locomotoras, neuróticas. También encontramos allí pistas de ski, lo que contribuye a que Borsa pueda ser una buena elección para descansar y pasarlo bien.
Otro punto de atracción en el Valle del Vaser es Mocanita: un célebre tren con locomotora a vapor que antes transportaba a los leñadores, y que ahora lleva a turistas para enseñarles los bellos y salvajes paisajes que acompañan el Valle. El tren recorre una distancia de 50 km, con distintas paradas, donde los turistas pueden descansar o de donde pueden empezar rutas a pie para descubrir nuevas atracciones de la región.
¿Qué hacer?
A Maramures mucha gente la considera el alma del pueblo típico rumano. Aquí puedes hacer turismo rural y eco-turismo, alojándote en una casa rural, comiendo platos tradicionales y siendo testigo de la fabricación de objetos de artesanía, para la cual se utilizan los mismos métodos desde hace siglos.
De la misma manera, los amantes de senderismo pueden explorar los alrededores de los pueblos maramuresinos para descubrir las tradiciones y las costumbres locales. También las Montañas de Rodna descubren paisajes únicos, con una flora y fauna especialmente ricas, y que incluyen el Parque Natural “Pietrosul Rodnei”, zona protegida desde 1932. Asimismo se pueden hacer rutas por el Parque Natural “Padurea Craiasca”, situado cerca de la ciudad balneario Ocna Sugatag.
Para los amantes de pesca deportiva, recomendamos las aguas rápidas de montaña del Valle de Mara, donde se puede pescar trucha.
El ciclismo es otro modo para poder explorar la región. Puedes disfrutar del paisaje mientras pedaleas de pueblo en pueblo. Los que quieran experimentar una ruta llena de retos, lo pueden hacer en las zonas montañosas.
En invierno, Maramures está cubierta por una capa de nieve, y su principal actividad es el ski. Las pistas de ski de la región son: Cavnic, Mogosa, Suior, Izvoare y Borsa.
Jungle Park Izvoare es un parque de aventuras abierto sólo en verano, donde los turistas juniors, pero también los adultos, pueden practicar la escalada en paredes artificiales, saltar en tirolina y disfrutar de muchas otras sorpresas.
Costumbres de Maramures
La región de Maramures es la tierra de las fiestas cristianas. Aquí el tiempo no se mide en meses, días y horas, sino en tiempo de la siembra, de la cuaresma y Semana Santa, tiempo de la cosecha y la celebración de la Asunción, de la cosecha de otoño y los preparativos de Navidad. Cuando acaban sus tareas, los maramuresinos festejan a lo grande. Bajan su cabeza humildemente para rezar, pero también disfrutan del baile o de los lugares donde han nacido. Para sentir el ritmo de esta región, se recomienda visitarla durante las fiestas, cuando la tierra, las costumbres y la gente se unen en un baile que la abraza entera.
En el Valle del Mara hay un pueblo, Giulesti, famoso por sus árboles, donde se cuelgan cazuelas. Esta costumbre de sus habitantes quiere decir que en la zona hay chicas casaderas.
Gastronomía
En cuanto a la gastronomía, los maramuresinos preparan sus platos tradicionales de distintas maneras. El “balmoș” es la especialidad de los pastores, y se hace con queso de oveja, leche y polenta (mămăliga). Para disfrutarlo no es necesario subir a la montaña, donde viven los pastores, porque te lo podrá preparar, con esmero y cariño, cualquier ama de casa de la zona.
Como entrante, es obligatorio un trago de la famosa bebida llamada “horinca” (leer “jorinca”) o “palinca”, una especie de aguardiente u orujo bastante fuerte. Los hombres de la zona sostienen que en ningún otro sitio en el país encontrarás mejor “horinca” que la de aquí. Se dice que si frotas una gota de “palinca” en las manos, ella debe desprender un olor característico, similar al de la miel.
Recuerdos
En la región de Maramures, los souvenirs son trabajados de manera manual/artesana y se pueden adquirir directamente en los talleres de los artistas, donde también se puede presenciar su fabricación. Aquí puedes comprar: objetos esculpidos en madera, tejidos, cerámica, máscaras de personajes fantásticos, el “clop”, que es un sombrero tradicional de paja, trajes regionales y adornos tradicionales.
La cultura de la madera
A la región de Maramures también se la conoce como “la tierra de la madera”. Los maramuresinos han desarrollado un verdadero culto de la madera. Casi todo está hecho en madera; desde cucharas y platos hasta iglesias. Pero lo que le confiere una identidad arquitectural incontestable es la puerta maramuresina. Las puertas llaman la atención y aseguran el orgullo del campesino, aparte del simbolismo que contienen. En los documentos medievales está recogido que solamente los nobles, los llamados “nemesi”, es decir personas libres, tenían derecho a tener este tipo de puertas. Los que las tenían se sometían directamente al rey y no a las autoridades locales. Los motivos esculpidos en madera tienen distintos significados: la soga torcida representa el infinito y también la unión entre el cielo y la tierra, el sol es el símbolo de Dios, del que da vida, y el árbol representa la vida eterna, la juventud sin vejez.
El tiempo en Maramures
Aunque el clima en Maramures es más húmedo y más frío que en el resto del país, los meses de verano pueden ser muy calurosos. En invierno el paisaje se vuelve blanco, ofreciendo a los esquiadores la posibilidad de disfrutar de pistas de varias dimensiones y grados de dificultad. Desde la llegada de la primavera y hasta los meses de otoño, el paisaje es propicio para rutas y senderismo.
¿Cuánto cuesta?
Presupuesto bajo. Alojarse en casas rurales, en régimen de media pensión, te puede costar unos 10-20 euros al día. Usando el transporte público y eligiendo el pueblo y no la ciudad, el día de viaje te puede salir por unos 15-30 euros por persona y día.
Presupuesto medio. Por unos 30-60 euros por persona y día, podrás alojarte en una casa rural confortable, podrás comer de restaurantes y salir por la noche en la ciudad. Si decides alquilar un coche, elige agencias locales porque salen muy bien de precio y ofrecen buen servicio.
Presupuesto alto. Unos 80-150 euros por persona y día podrán hacerte disfrutar de hoteles confortables, permitirte comer en los mejores restaurantes y participar en excursiones organizadas o alquilar un coche.